Pese a estar desnutrido lo sacaron del Paicor

 “Nacho”  tiene 10 años, le gusta jugar a la pelota en los recreos y salir a “trampear” gorriones en el campito cuando sale del cole. Nacho es un niño con bajo peso y principio de desnutrición, su Mamá el año pasado habían solicitado un refuerzo en la comida del Paicor. En este comienzo de clases, tanto Nacho como su mamá, se dieron con la noticia que se había quedado afuera del plan. La noticia se la dio el Dire la semana pasada, que para intentar consolar a la mamá desesperada, le dijo “no te hagas drama cuando haya arroz o fideos va a poder venir al comedor, por que ahí podemos dividir las raciones”.

María, mamá de Nacho, se quedó con el certificado del doctor en la mano derecha y con la planilla de los profesores que le recomendaban no hacer actividades por que “se cansa con facilidad”. Sin entender por qué, María partió hacia el Pablo Pizzurno a buscar una explicación por parte de los funcionarios. Hasta el momento nadie le dio una solución. Nacho mide 1,38 metros y pesa 30 kilos. Fue la seño del grado la que ayer a las 12, nuevamente, le dijo “no podes entrar al comedor, no estás en los padrones”. Nacho se quedó dando vueltas por los pasillos esperando que sus compañeros terminen rápido de comer para salir a jugar al patio. Ya el hambre se le había pasado. Mientras tanto su mamá llegaba a la puerta del colegio para alcanzarle un pebete. Nacho se tiene que quedar hasta las 14,30 por que tiene jornada extendida.

En el mismo cole de Nacho, tres chicos más con principios de desnutrición fueron sacados del Paicor. A ningún funcionario le importó que les falta peso, solo se limitaron a fijarse en el entre cruzamiento de datos. Los funcionarios no saben que, por ejemplo, el papá de Nacho hace bastante que se fue de casa y no manda plata. María, su mamá, trabaja limpiando casas por hora y no llega a los 1.500 pesos mensuales. En esa casa no solo come Nacho y su mamá, sino también su hermana, que va a la secundario y también la sacaron del Paicor. “No llegó, te juro que no llego a fin de mes con lo que cobro. Encima el Nacho no engorda. Él toma el café con leche a la noche, pero parece que no le alcanza.”, dice con los ojos mojados María.

Ni Nacho ni María entienden de SINTyS, ni de entre cruzamientos, ni de topes, su lucha diaria es otra, la de comer todos los días. Encima ahora los chicos no pueden entrar al comedor de la escuela.

Contradicciones del Paicor

Cuando se destapó este tema de la cantidad de chicos que el Paicor había dejado afuera del comedor, las autoridades lo primeros que atinaron a decir fue “Nosotros no nos guiamos por el INDEC”. Sin embargo en la circular que firma el titular del Programa, Gustavo Palomeque en ningún momento lo aclara y, es más, hace la diferencia entre “línea de pobreza e indigencia”. Rápidamente Palomeque se corrigió y dijo: “nuestro tope es 1.800 pesos para la línea de pobreza”, no habló de indigentes nunca. En la misma entrevista con este periodista, Palomeque se volvió a corregir y dijo “nuestro corte es de 2000 pesos”, ya no existía ni la línea de pobreza ni la línea de indigencia, esa misma línea que Palomeque había aclarado puntillosamente a los directores de las escuelas en su Circular Nº 1.  Ayer a la tarde y tras quedar en ridículo durante más de 24 horas, el gobierno nuevamente se corrigió y, mediante un comunicado, dijeron que “el corte ahora es de 2.500 pesos”. Fuera de micrófono los funcionarios afirman que hay un “monto ventana de 500 pesos, entre los 2000 y los 2500”. Ahora el mismísimo gobierno desmiente a su propio funcionario. Todo para intentar justificar por qué dejaron a tantos chicos sin comer.

Una nueva decisión del gobierno provoca bronca entre los padres y los docentes. Según los funcionarios van a sancionar a los docentes por haber colgado las listas de los NO ACEPTADOS por el Paicor en el colegio. Como si la responsabilidad de haber dejado afuera de los comedores a una cantidad enorme de chicos haya sido de los maestros. Otra incoherencia más, ¿y van?