martes, 15 de marzo de 2011

El Gobierno decide qué chico come

Foto de las listas elaboradas por Paicor colgadas en el ingreso de una escuela


Eran las 6 y media de la mañana y sonó el despertador del celular de Norma. Lo manoteó como pudo, abrió un ojo y apretó la tecla 'postergar'. Hizo fiaca 5 minutos y entredormida comenzó a repasar las tareas de la jornada que acababa de comenzar. Un día duro como todos, pero desde hace tres semanas también pasaron a ser días dolorosos. Norma es docente de una escuela donde asisten chicos muy humildes de barrio Mariano Fragueiro. A ella le tocó la tarea más difícil en lo que va de sus 15 años como docente: decirle a un niño que no puede quedarse a comer.
Sucede que el Paicor, por iniciativa de alguna de sus iluminadas autoridades elaboró este año un padrón de chicos “ACEPTADOS” y chicos “NO ACEPTADOS” y son los docentes los que tienen que dar la cara para decirles a ellos que no pueden quedarse a comer como lo hacían antes.
Desde el PAICOR mandaron una Circular, la Nº 1, que explica los motivos por los cuales se ha tomado esta decisión. Resulta que se realizó un entre cruzamiento con el Sistema de Identificación Nacional Tributario y Social (SINTyS), dependiente del Anses y todas aquellos padres que figuran como trabajadores en blanco, no importa el periodo, no deberán llevar a sus hijos a los comedores escolares. Asimismo el comunicado  excluye a los niños de toda familia que supere la línea de la pobreza o de la indigencia en sus ingresos generales. En este sentido hay que tener en cuenta que, según el Indec, para no caer bajo la línea de pobreza, una familia tipo -compuesta por dos adultos y dos menores- necesitó percibir en febrero ingresos por $1271,51. Y para no caer dentro la indigencia el mismo núcleo familiar debió obtener ingresos de por lo menos $580,26.
De estos datos, que fueron brindados por el instituto nacional hace horas, se desprende una serie de datos “inconcebibles” de las autoridades del Paicor:  

1- En una familia cordobesa, 2 adultos y dos menores deben desayunar, almorzar, merendar y cenar (y vivir) con $1271,51 (si son pobres), o $580,26 (si son indigentes),  sin recibir, los niños, una de las cuatro comidas esenciales por parte del estado.

2- No importa si una familia tiene mas de dos hijos (lo que es muy frecuente), de todos modos ninguno podrá alimentarse en la escuela si el ingreso supera los montos en los que se basa el PAICOR.

3- Para el Programa de Asistencia Integral Córdoba solo pueden comer en el colegio los chicos cuyos padres ni siquiera llegan a la categoría indigente.

Según la circular emitida por el PAICOR si alguno de los miembros de la familia esta registrado en blanco en el Anses, sus hijos no deberán comer en el colegio. Existen una gran cantidad de casos de personas que han tenido empleos eventuales (tres meses por la temporada de verano) y sus hijos han sido eliminados del sistema.
Para el PAICOR, el sueldo de un obrero de la construcción, por citar un ejemplo,  alcanza para darle de comer a su hijo en su casa y no en el colegio.

Al ser consultado por este tema, desde el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia han manifestado que ellos no acatan las números del INDEC, pese a que si se basan en el Sistema de Identificación Nacional Tributario y Social (SINTyS), para el entre cruzamiento de datos. Según las autoridades el tope para no ser pobre es de 2000 pesos. De esta cifra se desprende que para el Ministerio y para el PAICOR, con 2000 pesos por mes, una familia de 2 adultos y 2 menores, puede vivir sin ayuda del estado. Entiéndase por ayuda que sus hijos coman en el colegio.
Por estas decisiones miles de chicos han quedado afuera del PAICOR este año. Y lo peor: han quedado registrados en una especie de  “listas negras”. En las listas de los Chicos NO ACEPTADOS.   

“A mi me han sacado a mis tres hijos del PAICOR por que según ellos mi marido cobra bien. Mi esposo recibe un sueldo de 1800 pesos mensuales y no llego a poder vivir con ese dinero. ¿Como hago para decirles a mis hijos que no pueden comer en el colegio?”, manifestó una mamá indignada que estaba reclamando en la sede del PAICOR.

En algunos colegios fueron tan poco estudiados los casos que hasta han dejado sin el beneficio a alumnos que hasta el año pasado recibían un refuerzo por parte del PAICOR por que según los médicos oficiales estaban desnutridos. Es el caso de una niña que va a tercer grado de un colegio urbano-marginal, que hasta diciembre su única comida diaria era en la escuela y este año, junto a sus dos hermanos, el PAICOR No los Aceptó.

Mañana Norma vuelve al colegio, hoy ya le tuvo que decir a más de 110 pibes que no pueden comer más en la escuela por que así lo dicen las planillas. Salvo que el Paicor traiga arroz y ahí vemos i podemos convencer a las cocineras para que dividan las raciones.
Norma se levantará otro día con la más triste función, que jamás eligió y que esta lejos de ser su vocación: la de tener que decirle a niño que hoy, para él, no hay comida.



* En las próximas notas datos sobre colegios. Cuantas raciones recibía en año pasado y que cantidad este 2011.

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